Un
gran número de venezolanos entendemos las razones que tienen ustedes,
indignados de EUA y del mundo, para oponerse y luchar contra el sistema
capitalista y sus brazos usados contra los pueblos, concretamente el FMI, Banco
Mundial, AMC y otros.
¿Se imaginan por qué? La
respuesta es sencilla. Nos molestamos,
enfurecimos e indignamos hace más de 20 años. Históricamente, fuimos los
primeros en el mundo en revelarnos contra esas “instituciones”, el
neoliberalismo y el imperialismo. Hubo un momento en 1989 cuando nos hartamos,
estábamos hasta más arriba del cuello y decidimos ocupar varias ciudades. El
imperio y su gobierno títere reaccionaron de la única manera que saben y están
acostumbrados: REPRESION SALVAJE. Ahora, después de muchos años, no se sabe
cuantos murieron ni desaparecieron, los heridos fueron miles y las pérdidas
sociales y materiales imposibles de calcular. Esos eventos comenzaron un 27 de
Febrero de 1989, duraron varios días, y se le conoció como “El Caracazo” porque
en esa ciudad ocurrió lo peor. La lucha, lucha real, se prolongó por diez años
más hasta que el pueblo encontró una posible y aceptable solución.
La
solución a experimentar fue librarse de los políticos tradicionales y, por
supuesto, de esos partidos podridos. La democracia representativa formal fue
reemplazada por la democracia directa, o sea, EL PUEBLO TOMÓ LAS RIENDAS DEL
PAIS y esto ciertamente coincide con la definición de democracia, gobierno
del pueblo, por el pueblo, para el pueblo. Se llegó a la conclusión
final que esos partidos políticos no representaban al pueblo sino intereses
distintos, los de la oligarquía, las corporaciones nacionales, transnacionales
y el imperio. Descubrimos entonces, tal como ustedes lo hacen ahora, que éramos
más que ellos quienes son solo unos pocos; pero ellos estaban y están
organizados y nosotros no. Así que comenzamos a juntarnos, unirnos y
organizarnos, y así nos hemos mantenido hasta ahora.
Los
venezolanos elegimos un Presidente y otros funcionarios que no surgieron de
esos partidos políticos tradicionales, castas sociales, asociaciones
comerciales, industriales financieras o bancarias. El salió de lo profundo del
pueblo y no lo ha traicionado. El representó y todavía representa los intereses
del pueblo y ningún otro, y eso tan elemental explica su creciente popularidad
y la razón por la cual ha sido reelecto varias veces y así continuará siempre y
cuando gobierne para el pueblo y, sobretodo, con el pueblo. Uno de los secretos públicos de su éxito ha sido
transferir poder al pueblo y esa es, definitivamente, la forma de tener un gobierno del pueblo. Nadie conoce mejor
las necesidades del pueblo que el mismo pueblo. Además, es axiomáticamente
cierto: solo el pueblo salva al pueblo.
Se
redactó una nueva Constitución, pero no en un bufete de abogados. El pueblo fue
sabio para incluir la figura del referéndum
revocatorio para anular el mandato de todos los funcionarios electos; pero
también incluyó como derechos
constitucionales a la educación, salud, alimentación, vivienda, agua,
recursos naturales, el trabajo y otros. El presupuesto nacional debe ser
formulado de tal forma que el gasto social tenga la parte preponderante, lo que
contribuye a distribuir equitativamente la riqueza nacional.
Ustedes
pueden y tienen el derecho a pedir resultados. A pesar del hecho real que el
gobierno revolucionario empezó realmente a intentar alcanzar sus metas después
de 2004, solo después de “poner en la casa algo de orden”, aguantar la
desestabilización, golpes de estado, sabotajes, paros destructivos y atentados
criminales, etc. promovidos y financiados por fuerzas internas y externas, los
resultados son sorprendentes. Se han cumplido la mayoría de las Metas del
Milenio; se han disminuido drásticamente las tasas de pobreza, pobreza extrema,
desnutrición, enfermedades prevenibles y otros muchos aspectos; y, por el otro
lado, se han incrementado increíblemente los baremos sobre desarrollo humano,
distribución del ingreso, escolaridad, educación, salud, vivienda, esperanza de
vida, infraestructura, agua, saneamiento, comunicaciones, cultura, recursos
naturales y muchos otros. No los voy a fastidiar con cifras y programas pero,
si se interesan, están en las páginas especializadas de la Internet, tales como la ONU, UNESCO, CEPAL, FAO, e
inclusive el FMI y el Banco Mundial.
¿Errores, fallas y
equivocaciones? Muchos. Los reconocemos
e intentamos corregir y mejorar resultados, pero no hemos copiado ni calcado
ideas ajenas. Ha sido nuestra propia invención y hemos seguido el método
experimental de ensayo y error. Recuerden, los únicos que no cometen errores ni
se equivocan son los que no hacen nada.
El
concepto y el significado de gasto social han cambiado. Ahora es INVERSIÓN
SOCIAL. El dinero y los demás recursos se usan para mejorar el nivel de de vida
de tal forma que la población viva normalmente y disfrute mejores viviendas,
mejor educación y salud; mejores escuelas y hospitales, etc. Solo mencionaré
dos logros importantes: hace años de desterró el analfabetismo en Venezuela y
ahora ocupamos el cuarto puesto a nivel mundial en acceso a la educación
superior (Universitaria)
Está
escrito en la Biblia;
no des un pez, enseña a pescar. Me
atrevo a decir, da peces mientras estás
enseñando. Piénsalo.
¿Entienden
por qué no estamos indignados? Estuvimos rabiosos e indignados durante largo
tiempo y nadie en el mundo nos ayudó o solidarizó con nosotros. Fuimos
vanguardia solitaria y peleamos solos. He ahí la razón por la cual les
ofrecemos solidaridad y apoyo moral. Si accidentalmente ocurre que llegan a
saber que hacemos reuniones públicas, no es por protestar, es por demostrarles
nuestra solidaridad.
Solo
muy pocos de ustedes saben de todo esto. ¿Cómo es eso? Si los medios
controlados por las corporaciones hubieran informado con certeza, muchos de
ustedes supieran algo; pero no lo hicieron y, al contrario, desinformaron,
escondieron, retorcieron las noticias o simplemente mintieron: pero, además,
han continuado con su criminal campaña de descrédito contra el país, su pueblo
y su revolución. Ustedes inocentemente se preguntarán el por que. Piénsenlo un
poquito y llegarán a la concusión que las razones son las mismas que tienen
ahora para desacreditar los movimientos de ocupantes o, lo que es lo mismo,
ambos hechos históricos atentan de alguna manera contra los intereses
agiostístas de las corporaciones; en consecuencia, contra los intereses
políticos imperiales. Desgraciadamente, el sistema actual no representa los
intereses del pueblo (ni sus sueños) sino el de la plutocracia. Y ustedes, a
ellos, les importan un carajo. Pero ahora ya lo saben.
PATRIA
SOCIALISTA Y VICTORIA - ¡VIVIREMOS Y VENCEREMOS!
No hay comentarios:
Publicar un comentario