jueves, 12 de enero de 2012

Jesús de Nazareth

Lo repito, lo ratifico sin ambages y me niego de plano a retractarme de mi afirmación anterior que el más grande revolucionario de la historia fue y sigue siendo Jesús de Nazareth, cuyo nombre arameo era, más o menos, Joshua Ben Yusef, que significa Jesús Hijo de José. En latín lo escribieron Iesus y creo que en todos los idiomas modernos que se escriben con caracteres latinos se llama o se pronuncia Jesús, y en lo único que se diferencian algunos del castellano es en el acento sobre la letra U.

Parece mentira que me hayan escrito unos cuantos correos criticando, únicamente, esa afirmación contenida en mi anterior escrito y tan solo unos poquiticos dando opiniones favorables, lo cual agradezco infinitamente. La mayoría me produjeron hilaridad y que esos apreciados corresponsales perdonen mi franqueza. Hubo alguien que se opone casi brutalmente a mi condición de curero, beato, fanático religioso y otras lindezas. Inclusive hubo uno que llegó a calificarme de contrarrevolucionario de pacotilla.

Bueno, cuando escribí no llegué ni remotamente a pensar que tuviera que hacer esta tardía aclaratoria. Cuando hice mi afirmación no la hice siguiendo criterios religiosos como nunca lo hago. Tendré que pedir a esos puntillosos corresponsales que nos despojemos de cualquier criterio de esa naturaleza y con esa tónica actué, actúo y actuaré. Así que permítanme hacer varias observaciones, repito, totalmente desprovistas de intenciones “catequísticas”. Apoyémonos tan solo en evidencia histórica y pongamos a un lado creencias, mitos, leyendas, interpretaciones erradas o interesadas en el sentido que sea. Vuelvo a afirmar: el más grande revolucionario de la historia fue o es Jesús Nazareth. ¿Quieren más? También fue Socialista y Antiimperialista.

Parto de la definición de Revolución según una acepción que le da la Real Academia de la Lengua Española, Cambio rápido y profundo de cualquier cosa. Lo que sucede generalmente es que la gente ignorante asocia la palabra con violencia, guerra, muerte, desastre y otras porque así nos lo han inyectado malévolamente. No. Definitivamente no. En el campo político, desgraciadamente, en la mayoría de los casos ha sido así y ¿saben por qué? Muy sencillo, porque quienes se oponen al cambio han reaccionado violentamente por miedo a perder sus privilegios, inclusive en los casos cuando se han tratado de hacer los cambios de manera pacífica. ¿Acaso el reciente caso chileno de Salvador Allende no les hace recordar algo? Las revoluciones no han estado circunscritas estrictamente al campo político. Ha habido revoluciones en muchos campos que han tenido sus efectos, bien sea positivos o negativos. En la moda, la ciencia, la tecnología, el deporte, etc., etc.

Revolución es algo que produce un cambio total en las estructuras existentes.

Volvamos a Jesús. No fue un político en el sentido vernáculo de la palabra, a sea, no fue un líder de partido político tal como se entiende hoy en día. Hago una digresión: Un gran filósofo griego de la antigüedad acuñó el concepto que todos los hombres “conscientes” somos animales políticos – zoon politikon – porque nos ocupamos de una u otra forma de lo que ocurre en nuestra comunidad, en nuestra ciudad – nuestra polis, en idioma griego antiguo. De ahí, para los pocos que no lo sepan, se deriva la palabra POLITICO. Político, en definitiva, es alguien que se ocupa y preocupa en y por su comunidad, y su gente por supuesto. De ninguna manera es un asqueroso traficante de prebendas en conchupancia con los factores de poder en un régimen corrupto tal como lo hemos vivido a lo largo de casi doscientos años en nuestra Venezuela. No confundamos.

Jesús no fue Jefe de Estado, no condujo ejércitos, no formó ni dirigió sindicatos, no asistió a ninguna universidad, no escribió un libro, no fundó ninguna empresa, no tuvo dinero ni posesiones, no tuvo hijos – agregue el lector lo que desee a esta lista – y, sin embargo cambió la historia del mundo usando tan solo la fuerza de la palabra y su ejemplo de humildad al servicio de los demás, especialmente de quienes menos tenían, tienen o tendrán, a quienes les señaló el camino de su redención social. Sin embargo, su enorme influencia fue tal que dividió la historia del mundo en dos: AC/DC – antes de Cristo, después de Cristo. Inició la más grande revolución que aún está en proceso.

Insisto, olvidemos todo cuanto tenga que ver con religión y circunscribamos el razonamiento estrictamente a lo social. Repasemos algunas de sus sentencias lapidarias en ese sentido. Lo hago de memoria, les afirmo categóricamente que no tengo notas ni libros conmigo al momento de hacer este escrito. Lo más seguro es que dejaré por fuera afirmaciones suyas muy importantes que ahora no vendrán a mi memoria. De la misma manera pido a mis lectores sumar las que ellos deseen aportar.

El único camino a la paz es la justicia. Jesús fue el campeón de la igualdad porque sabía que la desigualdad social es el germen de la injusticia, o lo que es lo mismo, es el punto de partida para la explotación del hombre por el hombre. Quien explota a otro comete un crimen social, genera rabia en su contra y, por lo tanto, deseo y necesidad de reivindicación entre los explotados. Estos últimos intentarán de todo para alcanzar su redención social. El fenómeno de la injusticia, históricamente, se presenta en las relaciones entre individuos, grupos y entre naciones y ha sido la sempiterna fuente de conflictos a lo largo de la historia de la humanidad.

Cuando estén juntos como hermanos, yo estaré con ustedes. Jesús pide a la humanidad la búsqueda y el trabajo para conservar la unión entre todos porque sabía que cada individuo, por sí mismo, no tiene ninguna posibilidad de alcanzar nada. No requiere ninguna discusión llegar a la conclusión inevitable que la unidad fortalece las relaciones humanas y así, unidos, existe la posibilidad cierta de alcanzar logros benéficos para la colectividad; lo cual viene a ser una reiteración de la búsqueda de la ansiada justicia. En colectivo se generan los mecanismos para que se logren los objetivos de la redención social. La desunión es campo fértil para la explotación de los débiles por parte de quienes detentan el poder. Poder lo tiene quien puede económicamente, socialmente, políticamente y, más allá, quien posee los elementos coercitivos, valga decir las armas, para imponer su voluntad.

Bienaventurados los pobres porque de ellos será el reino. El reino es la tierra misma. Es aquí mismo. Se le ha querido añadir la palabra “cielo” y se ha manipulado a los desheredados para que se resignen y esperen la justicia celestial después de muertos cuando supuestamente serían sujetos de la justicia “divina”. No. No es así. Jesús cuando se refiere al Reino de Dios está hablando de un tiempo futuro con respecto a su propio tiempo, sin injusticias donde el hombre se realice a plenitud sin hambre ni miseria en vida; o lo que es lo mismo, en el reino de la justicia una vez alcanzada la redención social y esté vigente el reino de la igualdad plena. Ese es el reino al cual se refiere Jesús y no uno etéreo e inexistente. Sé de antemano que, tal vez, sufra un despiadado ataque por parte de pseudoteólogos y otros fanáticos que se escandalizarán por lo que estoy afirmando. Bienvenidos sean esos ataques y desde ya les replico con la frase de Don Quijote de la Mancha: si los perros ladran, Sancho amigo, es señal que cabalgamos.

Quien se sienta libre de pecado que arroje la primera piedra. Es una reconvención que Jesús nos hace a no juzgar las acciones de los demás, especialmente cuando no contamos con razones ni autoridad para hacerlo. Es fácil y común que los seres humanos se desboquen para criticar al prójimo, para ver la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio. Esta inveterada costumbre es punto de partida para cometer muchas injusticias, algo a lo cual Jesús es opuesto tajantemente. Parte de ese malhadado juzgamiento es la nefasta discriminación, y la consabida explotación, basada en falsos estereotipos raciales, étnicos, sociales, religiosos y de otra índole, fuente de tantos conflictos que han generado y continúan generando muerte, miseria y desolación.

Amaos los unos a los otros. Ama a tu prójimo. Perdona y ama a tu enemigo. No hagas a nadie lo que no quieres que nadie te haga. Se explica por sí solo y no requiere que haga explicaciones adicionales. Solo puedo decir lo obvio, si nos amamos entre nosotros, jamás tendremos conflictos, habrá paz, justicia e igualdad; en consecuencia, habríamos alcanzado la redención social; o lo que es lo mismo, habremos alcanzado el Reino al cual se refiere Jesús. Este reino pertenece a toda la humanidad. A todos absolutamente. No a ninguna confesión religiosa en particular. Jesús no establece ninguna diferencia. No hace discriminación alguna. Que esta última afirmación quede bien entendida es mi único propósito.


PATRIA SOCIALISTA Y VICTORIA  -  ¡VIVIREMOS Y VENCEREMOS!

3 comentarios:

  1. Bueno, ademas hay que señalar que Jesus entró en el templo con sus apostoles destruyendo los puestos de los comerciantes, que fue enviada una cohorte (400 soldados) a detenerle por temor a su "ejercito" y que cuando volvio del desierto vino a traer la espada...

    Pero mas alla de las referencias biblicas, fue un soberanista, crucificado por sus delitos politicos (por eso crucificaban los romanos, no por robos o delitos menores, en cuyo caso la justicia era aplicada por los propios judios), y su movimiento venia a traer el Reino de dios a la tierra, es decir, el reino de los judios a la patria dominada por los romanos.

    Ademas, por supuesto, aunque eso ya entra dentro del campo de la creencia, fue el inicio de una nueva religion que, si bien en principio era de amor, al final la convirtieron en complice de los crimenes del poder, y hoy el mensaje de Jesus, en general, es mas bien poco respetado por su propia iglesia.

    En definitiva, si que fue un revolucionario, y no solo politico y social, sino, y eso los cristianos no pueden rechazarlo, sobre todo religioso.

    Salud y buen año 2012 revolucionario!

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  2. Camarada José Luís;
    Un gran y afectuoso saludo Revolucionario, Socialista, Antiimperialista y Bolivariano.

    Como siempre tus comentarios tan acertados. Te los agradezco y reitero mis deseos que 2012 te sea muy propicio.

    Esa forma de opinar, de veras, enriquece el conocimiento que a veces nos dá por repartir modestamente. Como seguramente te diste cuenta, esto lo escribí impulsado por ciertos lectores a quienes prefiero no calificar. Realmente, antes de recibir ciertos mensajes no tenía en mente escribir al respecto.

    Gracias de nuevo y, como siempre, tus palabras son más que bienvenidas siempre.

    Salud y Feliz 2012.

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  3. El personaje de Jesus es un invento de la edad media, tiene componentes de otras religiones y otros gurus.

    Si quieres un revolucionario historico, ahí tienes a Buda, en una sociedad de castas dijo que cualquiera podia llegar a la iluminación, independientemente de su nivel social, puede que el Greco-Budismo haya influido en Jesus(si hubiese existido), la creación del personaje de Jesus esta claramente influenciada, por el Greco-Budismo, como ejemplo caminar sobre las aguas aparece en la literatura cristiana a partir del siglo III y no antes ¿por que? aunque el Greco-budismo llego incluso hasta egipto, era una religion de extranjeros, Los judios existen hoy en dia por su identidad religiosa, Teodosio se dio cuenta que el imperio se desmoronaba y la forma de cohesión social como en los Judios era la religio-estado, así sentó los pilares del catolicismo, mantenimiento del imperio, tu te autoproclamas anti-imperialista y al mismo tiempo utilizas las herramientas del imperio como escusa, es divertido ver como un libro de fantasias(Biblia) da para tanto, cada persona que conozco tienen su propia versión interesada sobre su Dios, así el Dios de los Judios como fantasia se convierte en lo que quiera cada uno, Asi he visto que cada ser humano tiene su amigo invisible que responde a sus inquietudes personales, como la interpretación de los Cristianos-Judios-Musulmanes, les lleva a pelearse entre ellos en nombre de esa fantasia, claro que se puede esperar de un Dios nacionalista, violento, vanidoso, celoso, genocida,etc,etc,etc.

    Feliz 2012.

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