domingo, 6 de marzo de 2016

Exitosos métodos mafiosos

Si quisieras convertirte en “empresario” exitoso que se mete bastante billuyo al bolsillo y burda de divisas a tus cuentas en el exterior, al estilo como lo hacen los miembros de fedecámaras, consecomercio, venemcham, ansa (minúsculas en señal de asco y repudio) y otras organizaciones explotadoras y expoliadoras, te daré algunas sugerencias como pensar, que lógica usar para lograrlo.

La primera idea me la dio alguien a quien accidentalmente escuché, creo que echando un chiste. Decía: quiero montar una guarapera, si el gobierno no me da dólares; entonces, que la gente se quede sin tomar guarapo. Esa es, sin el menor asumo de dudas una manera de pensar de los “empresarios”. No quieren arriesgar su propio capital pero si quieren que papá gobierno les financie sus aventuras. Recuerden lo que he repetido bastantes veces en estos escritos, la frase lapidaria muy descriptiva del corrupto Antonio Guzmán Blanco, quien sin dudas los conocía, en Venezuela no hay empresarios sino pulperos enfranelaos. Analicemos friamente y le daremos la razón.

Otro fue tan descarado como el anterior y, aunque también lo imagino como chiste malo, no deja de tener relación directa con ese modo de pensar y dirigir sus acciones a que me refiero. La expresión fue: le debo dinero a un compadre, le pediré al gobierno que le pague en mi nombre y, después tal vez le pague yo al gobierno. Traduzcamos. El tipo le debe plata a otro y pretende que el gobierno pague su deuda. No nos extrañemos porque eso ya pasó durante uno de los gobiernos de la llamada IV República, cuando el gobierno nacional asumió como suya una gigantesca deuda externa privada que, creo, todavía está pagando la república. Lo curioso de ese caso es que, supuestamente, ello repagarían al estado en moneda nacional lo que había pagado en su nombre; pero, como cosa curiosa también, esos papeles desaparecieron luego y ahora nadie sabe quienes y a que se comprometieron.

Que curioso que ahora los nuevos diputados de la derecha golpista antipatria, lacayos pitigringos. a la Asamblea Nacional están proponiendo una ley pidiendo lo mismo.

Ambos ejemplos corresponden a su manera de pensar. Así, con ese espíritu, es muy fácil ser negociante. Quiero montar un negocio, que el estado me de dinero para hacerlo, Tengo deudas, que el estado me las pague y después haré desaparecer los papeles y no devolveré el préstamo. Como diría cualquier guasón, ¡que manguangua!

Pero sigamos. Esa misma ley a la que me refiero también pretende derogar nada más y nada menos que la Ley del Trabajo, los Trabajadores y las Trabajadoras. Una vieja fea, seguramente otra reprimida sexual, presidente de la organización mafiosa llamada consecomercio (minúsculalas idem) declaró y está grabado que la Ley del Trabajo no puede ser para beneficiar a los trabajadores. ¿Debería ser entonces para beneficiar a los patrones expoliadores y explotadores? Según ella sí porque sin “empresas” no tendrían los trabajadores donde trabajar. Olvidó a propósito que ninguna empresa funciona sin trabajadores. Esos patronos son unos vagos, nunca he visto ni sabido de ninguno, por decir lo menos, agarrando una escoba; mucho menos, operando una máquina por no decir cargando sacos de cemento, maíz o nada.

Ellos son fervientes partidarios de la Ley del Embudo, lo ancho para mi y lo estrecho para todos los demás. Papá estado me da dinero para hacer y deshacer, hago lo que me da la gana, exploto los trabajadores, no pago impuestos, papá estado me paga las deudas y me enriquezco a costillas del estado y de los que expolio, a la gente que si trabaja. Repito lo del guasón: ¡Que manguangua!

Y lo peor de todo es que si el Gobierno les pone alguna condición, entonces quieren derrocarlo para ellos poner un gobierno servil a su gusto.

Me pregunto y les pregunto: ¿Va el pueblo a permitir esas tamañas inmoralidades?

Antes de responder esa pregunta, pongamos la mano en nuestros corazones, intentemos aclarar la mente, sincerarnos al máximo, razonar y luego expresar nuestra opinión teniendo en mente otra interrogante: ¿Es bueno para el país, para el pueblo, para satisfacer las necesidades sociales de tanta gente necesitada de salud, alimentación, educación, vivienda, infraestructura, recreación y otras necesidades vitales?

De nosotros depende. Y tú, ¿que vía tomarás? ¿El odio de los carroñeros, acaso, o la salud de todos nuestros compatriotas? Si triunfara lo primero, el daño sería para todos; no sería, sin dudas, exclusivamente para quienes apoyan la Revolución Bolivariana.


¡INDEPENDENCIA Y PATRIA SOCIALISTA! ¡VIVIREMOS Y VENCEREMOS!
¡CHAVEZ VIVE Y VIVE! ¡ÑA LUCHA SIGUE Y SIGUE!

1 comentario:

  1. "La ley del Trabajo no puede ser para beneficiar a los trabajdores" Maldito capitalismo. O se acaba el capitalismo, o se acaba el mundo.

    ResponderEliminar