martes, 11 de diciembre de 2012

Diciembre 2012

Observarán mis amigas(os) lectoras(es) que no he escrito ni una palabra durante los días que ya han pasado de este mes. En la cabeza me ha estado bullendo la idea de escribir algo agradable, sereno, pacífico, amable, etc. en concordancia con el supuesto espíritu que debe reinar en esta época del año y, aunque sé positivamente que a veces cuesta encontrar un tema bien apropiado, no había perdido las esperanzas. Hasta ahora no lo tenía y “para ponerle la tapa al frasco” nos da la vida ese tremendo tanganazo, el recrudecimiento de la enfermedad del Sr. Presidente Hugo Chávez.

Demás está decir que el porvenir inmediato de la Patria se puso sombrío aunque él mismo se encargó, haciendo un descomunal alarde de generosidad, de insuflarnos ánimos y esperanzas.

Veamos pues, de qué manera me las ingenio para convertir una tragedia en algo positivo, tal como suelen hacer los hombres que nacieron y se hicieron hombres a más de cien por ciento.

Sin duda alguna se trata de una prueba de fuego para la Revolución Bolivariana y he ahí lo altamente positivo para el pueblo, porque el pueblo tendrá su eterna sabiduría y sabrá sortear con éxito todos los obstáculos. Esa fe y esa seguridad en la sabiduría de nuestro pueblo nos obliga a tener un saludable optimismo. Por supuesto, no es para estar brincando en una pata ni haciendo jolgorios; no, no es para eso sino para insuflarnos un sano y poderoso optimismo cargado de energías que, a su vez, será uno de los mayores ingredientes para echar adelante con toda fuerza los elevadísimos propósitos de la revolución Bolivariana.

Chávez, así a secas como al hermano que todos llamamos sin protocolo alguno, nos dijo clarito lo que tenemos que hacer. ¡Hagámoslo! Solo eso pero cargados de fe, optimismo y energía positiva. No es tiempo de lloriqueos, no es tiempo de recular, no es tiempo de abatimiento. Tenemos una tarea ya, elegir a nuestros veintitrés gobernadores rojos rojitos y llenar todos los Concejos Legislativos de sangre roja rojita.

Y en el muy desgraciado caso que sobrevenga una tragedia mayor en contra de nuestros deseos y de nuestras peticiones colectivas, también tenemos una orden del Comandante y también sabremos qué hacer en su debido momento pero, P’ATRÁS NI PA COGE IMPULSO, P’ALANTE ES P’ALLA. ¿Queda alguna duda?

La tristeza no nos puede amilanar. Tenemos que sobreponernos a ella y a todo cuanto se oponga. Es como en la Guerra a Muerte que decretó El Libertador. Acabemos con todo obstáculo que se interponga incluyendo nuestra propia desidia. En los momentos difíciles tengamos presentes que “Rondón no ha peleado todavía”, está en la reserva.

Quien sepa rezar, rece. Quien desee meditar, medite. Quien sienta necesidad de ofrecer un sacrificio a sus Dioses, ofrézcalo. Pero que ninguno se enzanjone en eso porque tiene que estar alerta, preparado y dispuesto para la pelea que sea; pero, no ganaremos ninguna pelea a la que no vayamos con la alegría que comunica el optimismo y  la fe que la victoria es nuestra.

Adelante, enfrentemos este Diciembre y estas Navidades con buena cara y con la alegría que infunde el optimismo y la conciencia que todas las fuerzas cósmicas están de nuestro lado. No me pregunten por la miserable canalla, a esa ni la ignoro. No tiene jerarquía para ni siquiera darle el honor de ignorarla. Si vas por la calle y casi tropiezas con un excremento, lo ignoras y lo eludes. Repito, a “esos” ni siquiera ignorarlos.

¡Chávez sanará! – Lo prometo. Nuestros corazones estarán inmunes a la miseria humana.

PATRIA SOCIALISTA Y VICTORIA  -  ¡VIVIREMOS Y VENCEREMOS!

2 comentarios:

  1. Yo creo en los medicos y en la siencia. Que son nuestras únicas herramienta genuinas y verdadareas que podemos palapar con nuestras manos. Y si ellas no alcanzan y nuestro camarada Chavez, decide viajar al lado de Simón Bolivar... pues nosotros todos los que nos sentimos Bolivarianos y Revolucionarios tenemos el trabajo de continuar el legado de Chaves de Bolivar y Belgrano Y tantos otros. Pongamos los huevos arriba la mesa y a seguir con la Revolución Socialista en América Latina. Que Mierda.

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  2. El comentario de arriba no es aninomo, me olvide de firmar. Edgardo Colombo Semino desde Buenos Aires_Ar

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