Gringos
de mierda, váyanse al carajo – Hugo
Chávez.
Interrumpo
mi serie de escritos sobre las Guerras Económicas porque ha ocurrido
un evento que no podemos pasar desapercibido: se cayeron las caretas.
El Gobierno Revolucionario de la República Bolivariana de Venezuela
obligó al gobierno imperialista gringo a destapar su feo rostro
intervencionista en los asuntos internos de todo el mundo, lo obligó
a demostrar sus verdaderas intenciones de apoderarse de los recursos
naturales de nuestro país. Lo obligó a descubrirse publicamente
como el articulador de todos los planes macabros que tienen contra el
pueblo venezolano.
Creo
que por primera vez en la historia de todas las intervenciones que
han hecho en todo el planeta contra gobiernos que no se someten a sus
designios, han mostrado sus fauces sangrientas anticipadamente.
Publicamente han reconocido que son los impulsores de los planes de
desestabilización, de guerra, contra Venezuela.
La
impaciente locura de apoderarse de los recursos del país los llevó
a destaparse y han tenido el grosero atrevimiento de intentar imponer
una cartilla al país y ordenarle lo que tenemos que hacer; o sea,
obedecer sus macabras órdenes. ¡Pobrecitos! ¡Que idiotas son ellos
y peor aún sus apátridas lacayos! La estúpida arrogancia les
impide comprender que cosa es SOBERANIA y pretenden patearla.
Para
quienes aún no lo saben en Venezuela y el mundo, el día 15 de
febrero de 2014, un oficinista de décimacuarta categoría, un piche
empleaducho del departamento de estado gringo (en minúsculas en
señal de asco y repudio) tuvo el descarado, grosero y osado
atrevimiento de llamar a nuestro Embajador en la podrida e inútil
OEA y leerle las “órdenes”, entre ellas que el Gobierno Nacional
dejara hacer lo que le diera la gana; es decir, ejecutar las órdenes
de ellos, al traidor a la patria, el malandro fascista terrorista
drogadicto criminal leopoldo lópez (idem) y que liberaran los
gamberros asesinos incendiarios que recientemente han causado tanto
daño y desasosiego a los virtuosos habitantes de muchas partes del
país.
Ese
asqueroso delincuente, y unos cuantos más, son TRAIDORES A LA
PATRIA. En muchas partes del mundo esas crápulas son simplemente
fusiladas sin contemplación alguna. Es lo que merecen. Durante la
Guerra a Muerte los degollaban para ahorrar balas.
Pero
los gringos también tuvieron el descarado atrevimiento de
amenazarnos con “tomar medidas”. ¿Qué quieren decir con “tomar
medidas”? ¿Van a invadirnos y lanzar bombas solo mata chavistas
como han hecho con tantos sufridos países? Pues, que nos invadan
pero no nos doblegaremos y tendrán que matarnos a todos.
Citaré
algunas frases pronunciadas o escritas por nuestro Padre Libertador
simón Bolívar:
Cuando
el clarín de la Patria llama, hasta el llanto de la madre calla.
Si ese clarín sonara iríamos prestos a nuestra trinchera de lucha.
Alguien afirmó que EL AMOR A LA PATRIA ES SUPERIOR QUE EL AMOR A
LA MADRE Y A LOS HIJOS. De eso hay en la historia patria
muchas demostraciones
fehacientes, tales como el caso de la madre de los siete Hermanos
Torres, llamados los Macabeos, naturales de Carora (Lara) quienes
murieron en la Guerra de Independencia y la madre afirmó: Lástima
que estoy vieja y no puedo parir más hijos para dárselos a PATRIA.
O la madre de los cuatro
muchachos que murieron en la Batalla de La Victoria y le llevó al
General José Félix Ribas el menor, un niño de doce años, y
lo ofreció para que también muriera, si era el caso. Ofrendó
su quinto hijo ante el altar de la PATRIA.
Citaré
de memoria un segmento de la carta respuesta dirigida a Juan Bautista
Irving, enviado gringo a reclamar la devolución de varios barcos que
fueron capturados en el Orinoco despachando armas a los españoles,
cuando éste se atrevió a amenazar al Libertador: la mitad
de los hijos de la patria han muerto en esta guerra, y la otra mitad
está ansiosa de correr idéntica suerte, luchando contra España o
contra el mundo entero si éste se opone a nosotros.
Respuesta digna de un macho a las pretensiones de un vulgar
filibustero prepotente.
La
guerra económica desatada contra Venezuela no está desligada de
otras guerras. Es solo un componente malvado de una estrategia mayor
compuesta de otras formas de guerra también malvadas, la guerra
psicológica, la guerra mediática, la guerra terrorista y
todos los demás inventos, también perversos y malvados, para causar
daño a los pueblos que no se someten a los designios del imperio
gringo, afortunadamente en decadencia y en vías a su desaparición
que, ojalá,
sea pronto para beneplácito
de un mundo se vea libre de
esa demoníaca
peste. Bastante daño han causado a la humanidad...¡Y
ya basta!
¡INDEPENDENCIA
Y PATRIA SOCIALISTA!
¡VIVIREMOS Y VENCEREMOS! ¡CHÁVEZ VIVE! ¡LA
LUCHA SIGUE!